Somos personas normales y corrientes. Somos como tú: gente que se levanta por las mañanas para estudiar, para trabajar o para buscar trabajo, gente que tiene familia y amigos. Gente que trabaja duro todos los días para vivir y dar un futuro mejor a los que nos rodean.
Unos nos consideramos más trves, otros más alternativos. Unos industrialeros, otros no. Unos tenemos gustos bien definidos, otros consideramos que tenemos que darle más al industrial ochentero… Pero todos estamos preocupados e indignados por el panorama musical que vemos a nuestro alrededor. Por la corrupción de Reznor, How To Destroy Angels, Ministry, Rammstein, Sulpher, Marilyn Manson, … Por la indefensión del fan de Nine Inch Nails de a pie.
Esta situación nos hace daño a todos diariamente. Pero si todos nos unimos, podemos cambiarla. Es hora de ponerse en movimiento, hora de construir entre todos una mejor discografía de NIN. Por ello sostenemos firmemente lo siguiente:
- Las prioridades de toda sociedad avanzada han de ser la pesadez de Reptile, las letras porno de Closer, el estribillo de Head Like a Hole o las lágrimas al escuchar Hurt.
- Existen unos derechos básicos que deberían estar cubiertos en estas sociedades: derecho a soñar con un nuevo Downward Spiral, un disco doble como The Fragile, un debut como Pretty Hate Machine, un EP como Broken o un disco sencillo pero efectivo como With Teeth para una vida sana y feliz.
- El actual funcionamiento de la discografía de Reznor no atiende a estas prioridades y es un obstáculo para el progreso de la humanidad.
- El hype parte de los fans (hy=fans; pe=pajas) así que el derecho al hype debe ser de los fans. Sin embargo, Trent Reznor ni siquiera nos escucha. Sus funciones deberían ser la de llevar nuestro hype a otros nuevos fans, facilitando la escucha de NIN entre ciudadana mediante cauces directos y procurando el mayor beneficio para el grueso de la sociedad, no la de ganar Oscars a nuestra costa, atendiendo tan sólo a los dictados de los grandes poderes musicales y aferrándose al poder a través de una dictadura de pianitos Trent encabezada por las inamovibles siglas de ATTICUS ROSS.
- El ansia y acumulación de poder de opinión en unos pocos genera desigualdad, crispación e injusticia, lo cual conduce a la violencia, que rechazamos. El obsoleto y antinatural modelo en la discografía de NIN vigente bloquea la maquinaria social en una espiral que se consume a sí misma hypeando a unos pocos y sumiendo en la pobreza y la escasez de hype al resto. Hasta el colapso.
- La voluntad y fin de Reznor es la acumulación de hype, primándola por encima de la calidad de su discografía. Despilfarrando hype, destruyendo su leyenda, generando flames y fans infelices.
- Los fans de NIN formamos parte del engranaje de una máquina destinada a enriquecer a Reznor que no sabe ni de nuestras necesidades. Somos anónimos, pero sin nosotros nada de esto existiría, pues nosotros movemos su mundo.
- Si como sociedad aprendemos a no fiar nuestro futuro a una abstracta rentabilidad económica que nunca redunda en beneficio de la mayoría, podremos eliminar los abusos y carencias que todos sufrimos. Es necesaria una Revolución Reznoriana. Hemos puesto el ritmo de Only por encima de NIN y tenemos que ponerlo a nuestro servicio. Somos fans, no productos del mercado. No soy sólo lo que escucho, por qué lo escucho y a quién se lo bajo.
Por todo lo anterior, estoy indignado.
Creo que puedo cambiarlo.
Creo que puedo ayudar.
Sé que unidos podemos.
Lucha con nosotros. Es tu derecho.