Aidan Baker – Liminoid/Lifeforms (2010)

Aidan Baker - Liminoid/Lifeforms (2010)

Aidan Baker es de sobras conocido entre los que no siguen a menudo por ser el 50% más visible de dúo canadiense droner Nadja, grupo amado y odiado por los integrantes del blog a partes iguales, y que ha generado infinidad de locos debates en nuestro foro (¿a qué esperáis para registraros?). A pesar de que este hombre es prolífico hasta límites casi enfermos, de momento este es (que yo sepa), el único disco que ha sacado en solitario este año y he de reconocer que me ha sorprendido gratamente, consiguiendo destacar dentro de su discografía en solitario, que muchas veces peca de tirar demasiado hacia el ambient más insípido.

En este Liminiod/Lifeforms, Aidan se hace acompañar de todo un elenco de músicos que le acompañan con cellos, violines, diversas percusiones, … Todo un despliegue de recursos que es bastante raro en Aidan, pero que le da al disco una profundidad y unas texturas realmente impropias, teniendo en cuenta a lo que nos tiene acostumbrado: el ambient más relajado o el drone ruidista de aires etéreos.

El disco comienza con el tema Liminiod, que se presenta dividido en 4 tracks. El primero a modo de introducción no deja de ser un poco la visión personal de Aidan Baker en torno a la música clásica: caótica y oscura, haciendo que los instrumentos se vayan entrelazando para formar ambientes escasos de melodías pero ricos en atmósferas. La segunda parte, más psicodélica, está regidapor una percusiones en continuo crescendo que desembocan en la tercera parte, que recuerda poderosamente a muchas bandas postrockeras/folkies tipo Balmorhea. Ya el cuarto tema, más oscuro y experimental, nos muestra baterías desenfrenadas que se mezclan con cantos de la Iglesia ortodoxa copta, que ya recuerdan al aire insano que muchas veces presenta el drone compuesto por Baker.

El tema Lifeforms ya es más típico, y a mi parecer, bastante menos atractivo que la primera parte del disco. Ambient de aires droners sin mucha chicha (al menos comparado con Liminoid) salvo algunos momentos puntuales dispersos a lo largo de la media hora que dura el tema. Sólo destacable el uso de los diversos instrumentos de cuerda que ya aparecían en Liminiod, que le dan algo más de calidez al asunto.

En definitiva, un buen trabajo de Aidan Baker, que demuestra que a pesar de su amplia discografía, sabe todavía sorprendernos como lo hace con Liminoid.

Liminoid (Part I)
Liminoid (Part II)
Liminoid (Part III)
Liminoid (Part IV)
Lifeforms