Hacía mucho tiempo que no me llamaba la atención nada que pudiéramos calificar como música de vibraciones positivas, o como muchos diríamos “de buen rollo”. No era fácil, necesitaba algo desenfadado pero honesto y que transmitiera. Así quedé prendado de los catalanes Bullitt, un cuarteto que ha editado su segundo disco, arropados bajo el manto de la casi ya mítica discográfica Bcore.
En este Love or Die, Bullitt parecen haber abierto su espectro de sonidos, pero siguen manteniéndose estrictamente fieles a un rock alternativo con posos en los 90, que en el plano nacional podría recordar a The Unfinished Sympathy, y en el internacional, al sonido extrovertido de Foo Fighters, o incluso a Queens of the Stone Age. Desde el primer momento se saborea el sonido optimista y directo de Bullitt, el cual raya el power-pop y es sostenido por los eficaces riffs de dos guitarras que aprovechan sus sinergias y saben complementarse. Saben mostrarse amigables o frenéticas, e incluso sacar partido en modo acústico. También merece mención un baterista que sin necesidad de alardear, destaca y aporta muchos detalles.
Seguramente que Bullitt no hagan nada nuevo, pero saben construir melodías y hacer canciones de rock sin bajar el listón en ningún momento. Os los recomiendo para hacerles un hueco en la BSO de ese verano que tanto ansiáis llegue ya.
