Parece mentira, pero ya han pasado cinco años desde el último disco de Envy, el irregular Recitation, que quizás haya hecho que injustamente nos hayamos olvidado un poco de ellos, sobretodo cuando en estos años han aparecido bandas que han dado mucho que hablar y que claramente beben de ellos, como pueden ser Deafheaven (que curiosamente ayer mismo han anunciado una gira en USA con Envy).
Mirando hacia atrás…
Seguramente que el fan medio de Envy (o el concepto que tengo de él) se habrá alegrado tanto como yo con el arranque de Atheist’s Cornea: Blood Moonlight e Ignorant Rain and the End of the World son dos temas que parecen volver a las raíces screamo donde arrancaron su carrera. No tienen la pegada de los temas más salvajes de All the Footprints You’ve Ever Left and the Fear Expecting Ahead, pero sí que se acercan más que cualquier tema del Recitation y sus últimos EPs.
Puede que la producción no ayude, ya que Envy han ido limpiando su sonido con los años de manera más que notable, y que la característica voz de Fukagawa haya perdido aspereza, pero se nota un redescubrimiento de las vetas más hardcore y oscuras en su sonido. Quiero creer que esto es así porque la banda ha llegado a la conclusión de que resultan más interesantes cuando en lo instrumental basculan entre lo bonito y lo agresivo, y no apuestan todo al post-rock, género que combinan muy bien pero que les hace parecer anodinos cuando se la juegan todo a dicho género.
…para seguir en el mismo sitio
Por supuesto hay momento y lugar para los temas más post-rockeros, ahí está Shining Finger y también el sonido más optimista que empezaron a explorar a Recitation (An Insignificant Poem), pero si hay algo a destacar de este disco es la dupla que cierra Atheist’s Cornea, no por sonar especialmente novedosas, sino por reflejar la epicidad y emotividad de los mejores Envy. A veces se encuentran al borde de lo excesivo (como casi cualquier banda japonesa poniéndose épica/dramática), pero esto es la verdadera esencia del éxito de la banda e ingrediente clave de sus temas más míticos. Y es que es imposible no emocionarse con temas como Go Mad and Mark o A Warm Room, liga en la que Two Isolated Souls juega sin problemas.
Esto, que a priori es una de las principales y más celebradas características de Envy, también es su mayor losa. Y es que sufren el efecto de bandas como Explosions In The Sky, bandas fundamentales en sus respectivos géneros pero que actualmente apenas son capaces de marcar diferencias con los hijos que ellos mismo han engendrado. No llega al extremo de los texanos, pero sí que es verdad que ya hay muchas bandas que suenan como Envy, y Atheist’s Cornea no supone en ningún momento ningún paso adelante en su discografía.
Aún así, sí que Atheist’s Cornea mejora lo inmediatamente anterior de su discografía y nos recuerda el porqué tantas veces decimos aquello de “suenan rollo Envy”.