Johnny Booth es una jovencísima banda que proviene de Long Island (EEUU) y que debuta este año con su primer larga duración, Connections. Se podría estar hablando de un grupo más que se suma a la moda del nuevo metalcore y que solo sabe tirar de doble bombo, pero estaríamos muy equivocados, lo que este quinteto esconde dentro de ellos es un diamante en bruto.
Partiendo de una base hardcore, el grupo se dejará llevar entre lo caótico, los riffs de guitarra más metalizados y además por un cierto toque post-rock/hardcore que descubriremos en forma de coros o movimientos más centrados en una melodía más sentimental dentro de algunos temas. Así a bote pronto no descubrimos nada nuevo, la diferencia radica en que este disco está hecho con pura garra y corazón.
Escuchando Connections podremos recordar continuamente la influencia de grupos como Converge, los primeros Architects o The Dillinger Escape Plan. Sin duda este disco hará las delicias de los seguidores de las bandas anteriormente mencionadas. El sonido de todos los instrumentos en general es muy bueno, las guitarras suelen centrarse en riffs muy rítmicos y típicos de la música hardcore pero en ocasiones nos sorprenderán con tonalidades más graves y técnicas, otras con compases más épicos y metaleros. La batería maneja muy bien todos sus elementos, suele aportar ese toque de caos tan característico en estos chicos y cuando es apoyada por las guitarras rítmicas crean unas estrofas auténticamente demoledoras. En cuanto al bajo, es importante su presencia en este tipo de grupos, pero además en este caso se puede permitir el lujo de ser algo más expresivo en las fases más inspiradas del disco. Qué decir de la voz de uno de los cantantes revelación de esta escena. Otorga una característica que a mí me chifla en este tipo de grupos, esa voz chillona y aguda, que les va como anillo al dedo, aunque tampoco serán raros los rasgados más graves. Es una gozada oírle aguantar sus gritos.
En cuanto a la dinámica que sigue el disco es muy entretenida gracias a esos pasajes más post-rockeros que nos brindan en algunos temas, aunque la caña que meten estos chicos es razón suficiente para no aburrirse en ningún momento. Pills for Havoc fue elegida por el grupo para su primer videoclip. En ella se recogen todos los elementos mencionados anteriormente. Desde ella hasta Mr. Grey tenemos un comienzo de disco arrollador. Connections, la que da nombre al disco es probablemente la más carismática de todas, gracias a esos coros a mitad de tema. Pueblo Smash tiene uno de los riffs rítmicos más pegadizos que he oído nunca y Mr. Grey nos ofrecerá un final de canción delicioso. Esa es la fórmula que proponen Johnny Booth y así continuará el resto del disco con colaboración incluida del cantate de Betwen The Buried And Me, descubridlo por vosotros mismos.
Como ya dije Connections no ofrece nada nuevo, de hecho es una auténtica (y magistral) oda al breakdown, pero el disco transmite muchas buenas sensaciones. Podríamos estar hablando de que nos encontramos ante uno de los mejores debuts para este género en muchísimo tiempo. El metalcore/hardcore necesitaba de esto como el comer y Johnny Booth nos lo ha otorgado. A mi me han hecho feliz, disfruto como un enano con la escucha de su primer disco y me han vuelto a despertar aquellas sensaciones que no vivía desde hace unos cuantos años. Bravísimo.
