Cerramos el Top Internacional de 2017 con los puestos del 10 al 1. Tenéis la primera parte (del 30 al 21) aquí y la segunda parte (del 20 al 11) aquí.
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10
Ex Eye
Ex Eye
El prolífico Colin Stetson se ha unido junto a Shazhad Ismaily (Secret Chiefs 3), Greg Fox (Lirutgy) y Toby Summerfield para elaborar el disco de metal de 2017 creado fuera de los espacios ortodoxos del metal. Utilizando el saxo como un instrumento hipnótico, punzante, más creador de texturas que de melodías, Ex Eye nos llevan a un viaje de creatividad desbordante, donde jazz, noise, psicodelia y sludge se dan la mano, demostrando que la experimentalidad no está reñida con la cohesión y la claridad de ideas.
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9
Brand New
Science Fiction
En Science Fiction queda ya poco del emocore que dio forma al sonido de Brand New en sus inicios. Aún así, resta un enorme poso de frustración y depresión, ahora carente de agresividad e impulsividad juvenil. Inclinando la balanza hacia el lado de la introspección, el grupo abre su paleta hacia viejas sonoridades del rock americano mientras nos habla del miedo, la soledad y la hipocresía puritanista. Después de tanto tiempo esperando el disco no nos hubiéramos esperado que su despedida fuera a regalarnos un trabajo tan carismático.
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8
Sampha
Process
Lo primero que impresiona de Sampha es su timbre de voz y su estremecedora manera de cantar. Seguir rascando en la superficie significa, a parte de encontrarse con un excepcional cantante, darse cuenta de que hay una forma sensible de aplicar estructuras y sitios comunes de la música negra más actual al neosoul, pop y la música electrónica. Bastaría un piano y su voz desnuda para tenernos a sus pies, pero en Process Sampha tiene un amplio colchón donde dar una intensidad arrolladora a todas sus virtudes como artisa.
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7
Slowdive
Slowdive
Las grandes figuras del shoegaze británico no solo han vuelto a lo grande tras un parón de más de 20 años: su sonido te transporta a la época dorada donde el pop de las islas se había convertido en el centro de atención del panorama musical. La maestría compositiva del grupo va más allá de los ecos, delays y muros de sonido desplegados. Los elegantes velos no dejan de ser el ropaje a través del cual Goswell y Halstead nos arrastran hacia el reino de la melancolía sin tristeza, hacia una emotividad sincera y madura.
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6
Chino Amobi
Paradiso
Chino Amobi es uno de los co fundadores de NON Worlwide, colectivo de raíces africanas que pretende subvertir la cultura de masas occidental para reflexionar sobre los problemas inherentes de esta. Su primer disco sirve de punto de encuentro para los miembros de la NON, que participan en el cacofónico collage que propone PARADISO, lleno de ritmos industriales, noise, spoken word y un uso del sampleo que roza lo esquizofrénico. Es muy definitorio el momento de BLOOD OF THE COVENANT en el que una entusiasta voz nos dice “Welcome to Paradiso” a ritmo de música de club entre sirenas, cantos tradicionales africanos, airhorns y gemidos de satisfacción. No hay mejor disco que defina este incongruente 2017 repleto de mentiras camufladas en avalanchas de información vacua, avances tecnológicos presentados como rutas para una utopía humanista pero que amenazan con abrir más brechas sociales y de minorías reprimidas en el corazón de supuestos paraísos de libertad.
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5
Algiers
The Underside Of Power
A pesar de ser ya su segundo disco, la receta de Algiers tiene tanta fuerza que es casi imposible hacerla bajar de un top ganador. Su propuesta llena un hueco todavía muy vacío: donde el indie era incapaz de articular una crítica social más allá del nihilismo decadente y donde el soul era incapaz de integrarse en la dureza del industrial o el punk. Pero más importante que todo eso es que han regresado con mayor fuerza e ideas, ofreciéndonos canciones todavía más memorables.
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4
Blanck Mass
World Eater
Con este World Eater, Benjamin John Power ha subido a hombros de gigantes para ver más allá dentro de la música electrónica. Con los tratamientos y efectos vocales de Tim Hecker, la instrumentación glitch de Oneohtrix Point Never o incluso los ritmos marciales de Trent Reznor, Blanck Mass aporta ese punto de grandilocuencia y épica a los que nos tenía acostumbrados en trabajos anteriores. Otro de los mayores puntos a favor es ser capaz de encumbrar al estatus de hit canciones de más de 7 minutos, cargadas de requiebros y abrasión, a las que siempre nos quedamos con ganas de volver.
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3
Ho99o9
United States of Horror
Discazo, sin paliativos. Los fans del hip hop más cafre y oscuro tienen en Ho99o9 la horma de su zapato, pero también aquellos que vengan de Atari Teenage Riot o los fans del hardcore. Y es que United States of Horror mete en la batidora desde Bad Brains hasta Ministry, dando como resultado un disco inflamable repleto de arengas contra el fascismo, el racismo y los gobiernos autoritarios.
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2
Arca
Arca
Viniendo de una carrera que podríamos encajar a un género poco dado a los sentimentalismos evidentes como es la electrónica experimental, sorprende que Arca haya decidido en su disco homónimo dar protagonismo a su voz para cantar historias de amor cuál folclórica, un movimiento valiente y único que encaja sorprendentemente bien con su trabajo electrónico que tiende a lo barroco y a lo bizarro. Es loable que haya parido un disco tan estimulante y artístico (en la acepción más académica de la palabra) pero a su vez tan accesible, cosa a la mano de pocos elegidos. Da vértigo la juventud de Arca y la amplitud de los pasos que está dando hasta terrenos inexplorados, pero sin duda estamos ante uno de los autores musicales más interesantes y prometedores de los últimos años.
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1
Protomartyr
Relatives In Descent
El disco del año para el staff de SuicideByStar demuestra que el postpunk es un género en el que todavía se tienen cosas a decir. El cuarto álbum de Protomartyr es un delicioso trabajo que contiene decenas de recovecos, caminos secretos y melodías elusivas. A cada escucha nos descubre nuevos detalles mientras adquirimos una nueva perspectiva de las letras (discursos) de las canciones, y todo lo que al principio nos parecían piezas sueltas poco a poco van encajando en este interminable puzzle llamado Relatives In Descent.