SuicideByStar

Marissa Nadler – July (2014)

Como un cuadro de Velázquez en el que la luz y la atmósfera casi se presentan físicas, texturadas, así aparece el folk de Marissa Nadler en July, su quinto trabajo de estudio, un disco que deja entrever el alma que impregna la música y que si bien por el nombre refleja un aspecto cálido lo más cercano a ese concepto es una larga siesta de verano con sueños abstractos.

Recuerdos felices resonando en vetustos ambientes

Con un sonido que devuelve a la alegría de la juventud sobre los ecos de la madera de una casa vieja, la artista norteamericana —nunca mejor calificada como artista, debido a un impresionante dominio de diversas facetas como la pintura, el grabado o la encuadernación— nos ofrece once baladas que encajan en la tradición del folk europeo protagonizadas por su guitarra acústica y su característica voz angélica, sabiamente doblada con una producción que sin dejar un sonido hueco, sabe centrar todo el protagonismo en esos dos elementos principales; violines, slide guitars y guitarras de acompañamiento se utilizan en arreglos puntuales. Randall Dunn, productor con importante experiencia en proyectos atmosféricos, es el responsable.

Mi adjetivo es «solitario»

Depende del fondo de armario personal, algunos podrían calificar este trabajo como un disco oscuro. No solo Marissa Nadler sigue el paralelismo de Chelsea Wolfe de sus colaboraciones en el black-metal (fue la voz femenina en Portal Of Sorrow de Xastur), sino que es también el efecto fantasmagórico de su dream-folk lo que lo emparenta con la Reina de lo Darks (sic). De esta forma aunque podamos aceptar el tono de sus escalas menores y el carácter melancólico como oscuro, preferiría utilizar el término “solitario”, lo que es posiblemente la única pega que puedo poner a este precioso álbum, el cual mantiene durante demasiado tiempo un mismo estado anímico. Afortunadamente, la magia de piezas como Drive, Firecrackers, Dead City Emily o Anyone Else como grandes hitos del viaje y el nivel tan alto demostrado, hacen de July un disco impresincible esta temporada.