Pocos pero prolíficos años lleva este dúo canadiense (que era un proyecto en solitario de Aidan Baker hasta 2005) intentando llevar la idea que tenemos de la música un poco más al límite. Su música se puede generalizar como Drone o Doom. Canciones largas cargadas de cientos de sonidos, ruidos, distorsiones, cambios de volumen (repentinos o progresivos), voces guturales o suaves… Pero probablemente lo más sorprendente de Nadja es que a pesar de la tremenda carga de sonidos que hay al mismo tiempo (en 50 años aún se podrían descubrir cosas nuevas), las canciones son muy sólidas, incluso melódicas o bellas. Especialmente recomendable Stays Demons.
El disco apareció en 2003, pero esta versión totalmente regrabada ya poco recuerda al anterior.
Mutagen
Stays Demons
Incubation / Metamorphosis
Flowers Of Flesh
Untitled