SuicideByStar

Have a Nice Life – The Unnatural World (2014)

Han pasado nada menos que cinco años desde Deathconsciousness, el debut del dúo formado por Dan Barret y Tim Macuga. Desde entonces, algún que otro EP y algunos proyectos paralelos han visto luz, destacando Giles Corey, el proyecto en solitario de Dan Barret. Ahora, por fin, Have a Nice Life han vuelto. Reunidos por el destino, tal como nos indican en el título del séptimo tema.

Lo cierto es que puedo comprender que para compartir algo como Have a Nice Life, es necesario ser algo más que socios o amigos. Lo que este dúo nos ofrece es algo que cualquiera de nosotros rechazaría, pero no especialmente en el sentido musical, por la extrañísima mezcla de punk, drone, shoegaze, electrónica y muchas más etiquetas que podríamos usar para catalogarles. Más bien por su asfixiante interior, el nihilimo que lo rodea, que en mi opinión es la grandeza de Have a Nice Life. Y lo peor de todo, dejan claro que esta forma de presentarse no es una decisión suya, algo que dejan pasar con unas cervezas y unas risas en el bar después de ensayar los temas. Es simplemente así como viven el mundo. No es un falso victimismo con los que tantos artistas nos engañan, sino la terrible aceptación de la realidad de este tan antinatural mundo, provocado por una gran empatía ante los sufrimientos causados a pobres inocentes. Giles Corey, el granjero asesinado por brujería, o los niños maltratados en una institución para enfermos mentales y físicos en Pennsylvania son la gente que inspira Have a Nice Life. Así empieza Corpsey, con las declaraciones de un niño de dicha escuela/hospital recogidos por el documental Suffer the Little Children en 1968. Así era Deathconsciousness y así es The Unnatural World: posiblemente no encuentres en él algo que pidas, sino una petición hacia tí. Musicalmente hablando, The Unnatural World sigue el camino marcado por su aclamado antecesor. Desde el enérgico comienzo con Guggenheim Wax Museum se reconocen los característicos coros, ecos y los lamentos en las voces, el drum machine, la densa atmósfera… Defenestration Song evoca irremediablemente la figura de Ian Curtis, en un tema más directo y con un solo de guitarra inclusive, como novedad. En Music Will Untune the Sky, en cambio, se ausenta la percusión y predomina la faceta drone del grupo. Corpsey se transforma brutalmente con la entrada de la percusión como si de un tema de rythm n’ noise se tratara y no frena hasta el final, mientras Dan and Tim, Reunited by Fate pasa de un tema clásico al IDM de manera sorprendentemente natural.

En general, The Unnatural World tiene lo que esperaba de él, y algo más. Si algo tengo que objetar es que los temas más «temáticos» (los «punkis» Defenestration Song y Unholy Life y los «droners» Music Will Untune the Sky y Emptiness Will Eat the Witch) no están a la misma altura que los temas más variados, que son los que llevan el mayor peso del disco (Guggenheim Wax Museum, Burial Society, Corpsey y Dan and Tim). Espero, pues, que veamos mucho más material de Have a Nice Life en el futuro. Y si no es así, que sea porque la belleza haya salvado el mundo, tal como predijera el Príncipe en la novela de Dostoievsky.