Parov Stelar Trio – The Invisible Girl (2013)

ParovStelarTrio

Marcus Füreder puede enorgullecerse de ser el artífice del éxito de la fusión de los sonidos retro como el swing con las bases electrónicas. Su estilo fresco y bailable ya había sido llevado en múltiples ocasiones a los escenarios en formato de live band. Ahora, acompañado por dos instrumentistas habituales en sus actuaciones: Jerry diMonza y Max The Sax, Parov Stelar regresa en formato trío con un objetivo muy claro que Füreder sintetiza de esta forma: “todos los aspectos de la melancolía han sido reemplazados por un ansia de vida, de una forma más cruda, energética y directa de lo que normalmente esperarías de Parov Stelar”.

Los instrumentos vuelven a ser protagonistas

Como podremos esperar de esta mayor jovialidad, los samples de charleston y swing vuelven a ser los protagonistas, quedando las bases con un papel más rítmico y cimentario que en anteriores trabajos, que habían tenido un perfil mucho más electrónico. A decir verdad, sólo el tema Invisible Girl retiene este cariz. En la cara opuesta tenemos a Menage A Trois, donde un piano repasa escalas a libertad y las notas del saxo se desparraman sobre un loop de inspiración jazz y con claps. The Fireface sigue en esta tónica añadiendo el groove de un contrabajo, aunque aquí los samples cobran más protagonismo con el fin de quedarse prendidos en tu cabeza. At The Flamingo Bar recoge un enfoque más ecléctico y cálido, con guitarras, saxos y atmósferas que Füreder sabe hacer girar en una batidora y darles la vuelta con el desparpajo de los mejores dj’s. Sin duda, la mejor apuesta del disco.

Un peldaño por debajo de la experimentación deseada

The Invisible Girl es un trabajo correcto que basa el buen resultado en una fórmula de eficacia demostrada en anteriores trabajos del músico austriaco. Si bien el artista parece haber querido darle un nuevo impulso a su propuesta, traslandando la intensidad del directo a la grabación, queda la impresión de que se ha pecado de conservadurismo al incluir en el conjunto versiones discotequeras junto a los temás más lounge. La naturaleza del trío podría haber propiciado un tono más orgánico y que hubiera dado espacio a mayores desarrollos de instrumentos reales o apariciones vocales. Por mi parte, seguiré prefiriendo el halo más oscuro y nocturno del majestuoso Shine.

Nota: 7