Atención, antiguos y nostálgicos nu-metaleros, la época del numetal y el post-grunge acaba de recibir un golpe de aire fresco. Para todos los que quieran volver al momento en el que el nu-metal merecía la pena, la época de Korn, Limp Bizkit, Cold… Para todos los que sientan morriña por aquellos míticos grupos con los que todos alucinábamos pero que, por desgracia, degeneraron poco a poco y se fueron perdiendo. ¡Staind han vuelto!
Este disco homónimo nos enriquece los oídos en todo momento con unas canciones de lo más variadas y que tanto les caracterizaba en su día, aunque sin llegar al nivel de crudeza de hace una década con discos como Dysfuntion. A lo largo del disco se aprecian unas claras diferencias respecto a sus recientes trabajos, especialmente en la parte vocal, en la cual el cantante, Aaron Lewis, rasga la voz en casi todos los temas mientras que en otras mantiene esa preciosa voz melódica que sin duda le hacía inconfundible.
Este disco está cargado de potentes riffs de guitarra que rivalizan con el cantante por tener todo el protagonismo. Tiene un ritmo potente de principio a fin, exceptuando la última canción, Something to remind you, la más lenta del disco. Sin duda uno de los mejores temas (si te hace cerrar los ojos, es que eres de los míos). Pero las principales armas de este disco son temas como The Bottom o Paper Wings,con ese ritmo pesado y cañero que tanto se echaba de menos de la musica de los 90. Aún así tengo que reconocer que me cuesta destacar más temas y que realmente el disco es bastante compacto, aunque quizá me afecte demasiado la melancolía y me impida ser más objetiva.
Este nuevo trabajo me ha sorprendido gratamente, ya que no esperaba nada de Staind a estas alturas,al igual que de muchos grupos de su época. sin duda merece la pena darle unas escuchas, al menos para rememorar tiempos pasados. Escuchar lo nuevo de Staind no va a ser tiempo perdido.