Concierto en lunes, ritmo y compás, sala cambiada a última hora (menosmal) y a eso de las ocho y media, hora de apertura, apenas había público en la cola. Aquello tenía pinta de concierto «en familia»… pero no, según avanzaron los minutos, la sala ganaba ambiente y poco a poco se fue llenando, no en su totalidad y creando un ambiente agradable y ansioso para asistir a este gran concierto. La única pega que pongo a la sala es que su iluminación es demasiado oscura para mi gusto. Destacar también la mala fecha del concierto, que coincidía en Madrid con el de Sick Of It All + This is Hell, ambos conciertos hubieran tenido mejor acogida en distintas fechas. Así pues, el primer grupo se disponía a abrir la velada alrededor de las nueve menos cuarto.
The Eyes Of A Traitor, son un grupo inglés de metalcore que tuvo la dificultad de empezar el concierto rompiendo el hielo y consiguiendo que la gente empezara a entrar en calor. El cantante Jack Delany captaba la atención de todos con su movimiento constante y una gran soltura y empezó bajandose del escenario y sorprendiendo a todos los espectadores con una voz rasgada impresionante e incansable canción tras canción. No sonaron igual que en estudio, para nada, en directo parecían sometidos a un sonido más estandar dentro del metalcore y los matizes mostrados en disco no eran tan apreciados, aun así, me pareció un buen grupo para empezar la noche y tenía ganas de verlos, buenas guitarras por cierto.
Su mejor momento fue durante la canción Echoes de su ultimo disco A Clear Perception (2009) que el grupo clavó en directo y que hizo que la gente se animara con mayor entusiasmo, una canción esperada por todos nosotros.
El siguiente turno era para los estadounidenses Iwrestledabearonce, un grupo al que todos guardabamos gran espectación por ver que nos mostraban en directo, con un estilo imposible de definir ya que son unicos y muy experimentales (unión de deathcore, rock indie/alternativo y toque personal).
Al menos, consiguieron dejar con la boca abierta a todos con la increíble y potente voz de la cantante Krysta Cameron que tanto rasgando como en melódico se hubiera escuchado a 3 km de distancia si no llega a estar la sala insonorizada. Un grupo de muchos matizes, de nuevo menos audibles que en estudio (aunque no gozan de una gran producción) que descolocaba con los cambios en la cancion y sorprendía con relinchos, bocinas y estribillos como el del Inspector Gadget. A mi me pareció una buena experiencia el haber podido disfrutarlos en directo, gran parte del público parecía haberse divertido de lo lindo con este grupo peculiar. Pero no nos olvidemos de la gran soltura en el escenario destacando The Cat’s Pajamas enlazada con Black-Eyed Bush y See You In The Shell, donde la cantante quedó tirada en el escenario como podemos ver en uno de los videos que dejo en comentarios.
Llegaba el plato fuerte, The Chariot,la banda cristiana estadounidense con su estilo también muy particular y difícil de definir. El concierto a estas alturas ya estaba bien calentito y la gente ansiaba má. Llenando esas ganas, The Chariot, fueron una absoluta locura de grupo, en el buen sentido.
Hicieron un tremendo espectáculo de movimientos, donde destacar al bajista John Kindler, un absoluto showman que no paró en todo el concierto, con giros increíbles del bajo alrededor de su cuello, saltando desde el piso superior al suelo (una distancia facil de 3 metros) y bajando del escenario hacia la multitud creando un circulo a su alrededor donde ya temiamos por llevarnos un buen meneo con su bajo… tras ver esto, uno esta agradeciendo al cielo no haberse perdido este directo, que buenos son the Chariot y que espectaculo ofrecieron. Otro componente que impresionó fue el cantante Josh Scogin, otro que también pretendia subirse donde le dejaran, podría ser la bateria encima de los platillos o un altavoz a dos metros de altura.
Pero en cuestión de técnica y sonido también fueron espectaculares, los temas parecieron coger todo su sentido y su fuerza (grandisima Daggers), mucho mejores cuando los ves en directo expresando sus canciones y arropados por el público enloquecido. En general se puede decir que el concierto fue simplemente IMPRESIONANTE, uno de los mejores y más locos conciertos en los que he estado, donde sólo me queda destacar la virtuosidad de los guitarras en algunos solos, el bateria de The Chariot David Kennedy que parecía que iba a romper su instrumento (ojalá tuviera una batería en casa para hacer exactamente eso) y la soltura de los tres grupos en el escenario.
Crónica, videos y fotos por patpatpat.