Para su quinto disco, The Dillinger Escape Plan han vuelto con ganas de carne y sangre. La afición —por no llamarlo obsesión— de utilizar la música como un cuchillo ha sido la característica fundamental desde los inicios de este grupo de locos del que la rumorología mitómana hizo decirse en su momento que se jugaban los patrones rítmicos a base de tiradas de dados. Aún así, desde Miss Machine el grupo fue enriqueciendo su espectro con temas más melódicos hasta el punto de gozar un rotundo equilibrio en su anterior referencia Option Paralysis.
Esto somos y esto es lo que sabemos hacer
One Of Us Is The Killer no es para nada ningún punto de ruptura e inflexión, solo la nueva reafirmación del carácter del grupo. Fácil de aceptar para seguidores de su sonido y difícil de buscarle los tres pies, lo que es en definitiva una apuesta conservadora. No llegará a las cotas de virtuismo de la violencia controlada de Miss Machine, ni da un paso más allá en la experimentación que supuso Ire Works, sin embargo su principal virtud es una mayor integración a nivel de canción de todas facetas de la banda, la jazzy, la mathcore, la electrónica, la melódica y la psicotrópica. Intrincados entre la madeja de hachas, se vislumbran las migajas de estos detalles de crossover entre géneros dispares y que más que nunca rescatan los ecos de “pesadillas rosas” de proyectos como Mr. Bungle. Precisamente la mayor frecuencia de las voces aflautadas que nos ofrece Greg Puciato, vuelve a posar las miradas en el maestro Mike Patton.
Los locos ya no son tan entrañables desde que existe el MDMA
Con un nivel muy parejo en todo el disco es difícil resaltar temas individuales. Tras la sangrienta mordida de Prancer y las dejadas de baqueta sobre caja en When I Lost My Bet que saben cómo hacer elegante la destrucción, el tema que da el nombre al disco es sin lugar a dudas ese single carismático de estribillo melódico pegadizo y con tono vacilón que recuerda al Milk Lizard. Otro de los temas redondos es Nothing’s Funny, donde la mirada del conductor asesino se refleja en los ojos de Puciato, protagonista definitivo de episodios tróspidos relacionados con las drogas. De los temas más rompecuellos e intrincados que podemos recomendar es Understanding Decay —no en vano el grupo ha declarado que fue el que más les costó componer—.
Los amaestradores del caos lo han vuelto a hacer
Dicen que el poder de lo habitual puede llegar a hacerte desmoralizar incluso en ese gran trabajo que siempre deseaste o llegar a hacer desenamorarte de la persona perfecta con los que muchos caerían rendidos. Es por ello que creo que es de rigor no dejarnos insensibilizar ante el apabullante dominio del caos de este grupo y valorar One Of Us Is The Killer por lo que es: un buen trabajo de extremismo sonoro, capaz de horrorizar a tu madre pero a la vez capaz de colarse sin disfraz en la playlist de un rockero. y libre estilísticamente hasta el nivel de lo que puede dar de sí la madura personalidad del grupo, ampliamente trabajada en sus cinco trabajos anteriores.