Vale que seguramente no leas mucho el nombre de Dan Barrett en los medios más trendy que hay en esas cafeterías tan cuquis del centro de tu ciudad, pero es un nombre que debería sonar a cualquier persona más o menos versada en el metal/rock más vanguardista y experimental. Incluso puede que no hayas escuchado ni Have a Nice Life ni Giles Corey (ya tienes tarea), pero seguro que te suenan algunos de los grupos que ha editado bajo The Flenser o Enemies List Home Recordings (Panopticon, Botanist, Deafheaven, Bosse-de-Nage, …). Pues a esta lista de cosas por las que tener en cuenta a Dan Barrett hay que sumarle otra, y es que este año ha arrancado la que vendría a ser su tercera criatura musical: Black Wing.
Máquinas hipnóticas
Black Wing es un nuevo proyecto a medias, ya que desde Agosto de 2013 conocíamos el tercer corte de este …Is Doomed (My Body Betrayed Me), el cual destacó por ser un curioso acercamiento de Barrett a la electrónica y que entusiasmó a muchos, lo que nos lleva directamente a este 2015 en el que Dan ha decidido publicar un disco completo.
Pocos discos pueden tener un sonido tan cercano a su trasfondo, y es que …Is Doomed tiene como leit motiv un verano que Dan pasó encerrado en su casa con graves problemas de salud. Cuenta que el contraste entre los maravillosos y soleados días y el interior de su cuarto lleno de enfermedad y pitidos de máquinas médicas le llevó a plantearse el sonido de Black Wing, que denomina como “chillwave depresivo”, intentando crear la banda sonora perfecta para conducir distraído y algo melancólico con las ventanillas bajadas.
Es difícil quitarse esas imágenes de la cabeza mientras escuchas …Is Doomed, ya que su mezcla de shoegaze, electrónica de sintetizador ochentero y dreampop casa a la perfección con esa melancolía que tan bien sabe evocar Dan Barrett en todo lo que compone, reforzada por su voz ahogada en ecos. Todo ello bajo unas atmósferas mesméricas que parecen nacer de esos momentos en los que te encuentras entre despierto y dormido y quedas atrapado en hipnóticos sueños carentes de sentido pero de apariencia muy real.
Perdido en el sueño
Siendo …Is Doomed un disco evocador y provisto de un sonido con una personalidad muy marcada, esta termina resultando demasiado plana a pesar de que Dan lleve su sonido desde la pista de baile de una discoteca dark (Dsa) al fondo de negros pozos (Unemployed). Todo lo demás no se encuentra muy lejos de lo que ya escuchamos hace 2 años en My Body Betrayed Me, lo que termina dejando el regusto amargo de las oportunidades perdidas y la sensación de encontrarnos ante un proyecto menor.
Aún así …Is Doomed es un disco que bien merece una escucha atenta por lo único de su propuesta, seas fan o no de Dan Barrett.